Cabe destacar que la Sala Augusta acogerá proyecciones este viernes y este sábado del filme a partir de las 18.30 horas

La vida de Arturito Pomar, el niño prodigio mallorquín del ajedrez, ha saltado este jueves (y repetirá viernes y sábado) del tablero cuadriculado a la rectangular pantalla de cine. Ha sido en la Sala Augusta de Palma, donde se ha proyectado, El petit peó, de Joan Gamero, que se adentra precisamente en la parte más íntima y personal del isleño que llegó a hacer tablas con Alexander Alekhine con solo 12 años.
La Sala Augusta, pues, ha acogido al equipo del filme, incluido el director mismo, Gamero, aficionado al ajedrez y que tiene relación con algunos de los hijos de Pomar. De hecho, el origen del documental nace en parte por esa conexión, ya que jugando con la hija del ajedrecista fue que surgió la posible idea de una película al notar la figura ausente dentro de la familia de un personaje tan atractivo.
Para el documental, Gamero viajó a Mallorca para entrevistarse con Jeroni Bergas, quien tiene un museo dedicado al propio Pomar en Maria de la Salut, el gran maestro Miguel Illescas, así como el también gran maestro Juan Manuel Bellón, valenciano de origen y mallorquín de acogida. El equipo de la película, que fue producida localmente por La Periférica, acudió al estreno así como también las personas que aportaron testimonios aquí.
Aunque el estreno por todo lo alto ha sido este jueves, cabe destacar que la Sala Augusta también acogerá proyecciones viernes y sábado del filme a partir de las 18.30 horas. En él se podrá conocer de primera mano la parte más personal de la vida de Pomar, que llegó a ser tan famoso como lo es hoy Rafa Nadal, en palabras del director del filme, y que fue un juguete roto utilizado por la dictadura franquista, que se olvidó de él cuando dejó de ser mediáticamente interesante (cuando dejó de ser un niño).
Pomar pasó de codearse peón con peón con algunos de los más importantes maestros del ajedrez mundial a trabajar como funcionario de Correos y con una esquizofrenia diagnosticada bien tempranamente. A pesar de todo, nunca dejó de jugar al ajedrez, pero si disfrutaba con ello o no es algo que genera controversia. Para saber más, vean la película.

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